diumenge, 26 de febrer del 2017

PREEM & PRITHI, VISITANDO BRICK LANE MARKET

Establecimiento: Preem & Prithi
E1 6 London
120-124 Brick Lane
Tfn 44 20 7247 0397
Precio orientativo:  £18

Preem & Prithi

Cocina india, tandoori, curry. Opciones vegetarianas, precios económicos, buenos platos, atención justa. Ubicación de visita obligada en Londres. Un 3 estrellas Pepa Pink.

LOCAL
Acceso:
Escalones
Aparcamiento:
Calles aledañas
Espacio:
Mediano (60p)
Distribución:
Amplia
Iluminación:
Bona
Mobiliario:
Sillas
Limpieza lavabo:
-
Secador de manos:
-
Cambiador:
-
Extras:
-
PERSONAL
CARTA
Vestuario:
Uniforme
Amabilidad:
Eficacia:
Presentación:
Clásica

Vinos y cava:
-
Otros:
IDIOMAS
English
Hindi




Para comer cocina india en Londres nada mejor que la zona que hay delante del Spitalfields Market. Caminas un par de calles hacia dentro y te encuentras con la famosa calle de Brick Lane, que empieza con la Stolenspace Gallery y acaba en The Brick Lane Gallery, perfecto si te gusta el arte. En el número 91 hay una antigua cervecera, The Old Truman Breweryque ahora es un espacio destinado a mercado de ropa, complementos, arte... y también una explanada ocupada por numerosos puestos de comida de diferentes cocinas del mundo, la Ely's Yard. Si prefieres comer sentado hay un par de ofertas tipo burger, BBq y similar, con unas mesas de esas que llevan el banco incorporado y la otra opción és la numerosa oferta de restaurantes de cocina india que hay en la misma Brick Lane. Te asaltarán desde cada restaurante diciéndote que son los mejores, los más económicos, los que mejor te atienden y muchos presumiendo de tener gran cantidad de platos vegetarianos, una forma de comer cada vez más extendida en la sociedad actual.
Nos decidimos por este porque Nagore, que nos acompañaba ese día, ya había estado un par de veces y le apetecía repetir. La atención es bastante seca y casi que nos apremiaron para escoger los platos. Luego no fueron tan rápidos en servirlos.

Empezamos con unas tortillas llamadas papadum, que vienen con tres acompañamientos, o salsas, de diferentes intensidades de picante. Un buen entretenimiento para esperar los platos.
Unas vegetable samosa, un bocado típico de la cocina india, que estaban bien, sin exceso de aceite y con más acompañamiento "verde". Un plato bastante abundante si fuera para una persona.
Un plato que me encantó fue el Lamb Korma, cordero guisado en una salsa que lleva leche de coco, frutos secos y no sé que más pero que está de muerte. Aunque venía con plato de pan de pita, nosotros lo acompañamos con un coconut rice (arroz de coco) que aunque parezca que es mucho coco le va perfectamente. Está claro que cuando vaya a cualquier otro restaurante de cocina de la India pediré carne "al korma".

Para probar otro clásico pedimos media pollo estilo tandoori,
Tandoori Chicken, que venía con arroz para completar el plato. La palabra tandoori se refiere a la forma de cocinarlo, en un horno de arcilla. Normalmente, entre muchas otras especias, lleva cúrcuma en cantidad y el pollo adquiere un tono anaranjado. La cúrcuma no es de mis especias favoritas así que este plato tampoco, a no ser que lleve el aditivo "masala" (una mezcla de clavo, canela, nuez moscada, pimienta, cardamomo, sésamo y laurel, entre los más habituales). Pedimos otro plato de cordero, Lamb Hunza, otro guiso con una salsa más espesa, con base de tomate y un poco picante, espolverado con cilantro y acompañado de ensalda.
Ya no pedimos postre, no pudimos ni acabar los platos y nos prepararon para llevar el pollo y el cordero que quedó. Al pedir la cuenta nos dijeron el total de palabra y cuando pedimos el ticket o la factura todo fueron malas caras. El total fue de unas 18 libras por persona, con bebidas incluidas y un extra de casi 5 libras que supongo que sería de los envases y la molestia de hacer el ticket.
La comida estaba muy buena y los precios nada desorbitados, teniendo en cuenta que es Londres y que ya las bebidas cuestan eso en otros locales, es un sitio que os recomiendo tanto por los platos como por la zona: Brick Lane merece una visita y Spitalfields también.

diumenge, 19 de febrer del 2017

DIÁMETRO 26 by lab, PER FER UN ÀPAT ITALIÀ INFORMAL

Establiment: Diámetro 26
43003 Tarragona
Carrer de la Nau, 6
Tfn 695 18 58 51
Preu orientatiu: 18 €
Menú diari: 12 €

Diámetro 26 by lab Tancat, buscant nova ubicació.

Pizza, focacce i pastes. Pastisos casolans. Molt bona atenció i preus econòmics. Menú diari i fets a mida per a grups. Un 3 estrelles Pepa Pink.


LOCAL
Accés:
Esglaons
Aparcament:
Fàcil
Espai:
Mitjà (40p)
Distribució:
Ampla
Il·luminació:
Bona
Mobiliari:
Cadires
Neteja serveis:
Bona
Assecador de mans:
Paper
Canviador:
No
Extres:
No
PERSONAL
CARTA
Vestuari:
Uniforme
Amabilitat:
Eficàcia:
Presentació:
Tipus bloc

Vins i caves:
De la Terra
D'altres terres
Altres:
Plats sense gluten sota petició previa
IDIOMES
Català
Castellà




La Part Alta de Tarragona va variant la seva oferta gastronòmica i el que abans era un lloc per menjar arrossos, ara és un restaurant italià on poder menjar una deliciosa pizza, una focaccia o pasta fresca. També hi ha amanides, postres casolans i, segons disponibilitat, formatges italians.
La Osteria del lab és un restaurant italià que ens agrada força (podeu veure la ressenya fent clic aquí) així que quan vam veure que aquesta pizzeria tenia "el cognom" by lab, no vam dubtar en entrar-hi.
Amb les begudes van servir un aperitiu de cortesia: focaccia amb mozarella i tomàquet. El Santi es va demanar una cervesa i jo una copa de vi de la casa, el Convidat, un vi jove català.
Dins de l'oferta d'amanides ens vam decidir per la de crema de iogurt de cabra, que portava una base d'enciams amb poma, maduixa, meló i móres. Molt fresca amb les fruites i molt bona idea acompanyar-la amb unes porcions de pa tipus focaccia.
Per poder tastar les pizzes, vam demanar la pizza gustosa, de massa alta i ben plena de pernil dolç, xampinyons, formatge fontina i parmesano. La base ja porta mozarella i tomàquet.
I una focaccia de mortadel·la, en aquest cas trufada, que emetia una aroma intensa i estava força bona. La massa gruixa de la focaccia, amb els forats més grans, queda un pic menys esponjosa.
Les pizzes i focacce són grans, de 26 cm de diàmetre, que juntament amb l'amanida, per sopar ja es prou i no vam demanar postres. El compte, 35 € tots dos, molt bé per fer un soparet informal.
Després d'aquesta experiència positiva, i en previsió d'un sopar de grup que havíem de fer, vam preguntar per un menú de grup i vam reservar taula per uns 16. El menú seria una amanida, pizza o pasta (a escollir), una beguda i postres, tot per 15 €. Després vam pagar una mica més perquè vam beure un vermut o cervesa a l'arribada i més vi durant el sopar. Els plats molt bé: amanides, embotits (destacar que el speck estava deliciós) i un pizza a elegir. Pels que volíem pasta, eren 4 només, ens vam dir que farien una pasta amb mol·luscs i calamarsets que havien trobat al mercat aquell dia. El resultat de la pasta espectacular, boníssim; una pega, que es va quedar curt el plat i més en comparació amb la quantitat de la resta de plats. Pot ser haver posat a l'aigua un parell més de paccheri per cap no ens hauria deixat amb la sensació de "ja està???" Per postres un tiramisú casolà força bo.




Un lloc amb bona música ambiental, amb taules altes al fons del local amb una oferta econòmica de plats base de la cuina italiana: pizza, focaccia, pasta fresca, cremes i amanides. Perfecte per fer un dinar o sopar informal i amb la qualitat que esperàvem "by lab".

diumenge, 12 de febrer del 2017

MESÓN NAZARENO Y ORO, EN LA CIUDAD DE LAS CASAS COLGADAS

Establecimiento: Mesón Nazareno y Oro
16002 Cuenca
Calle Colón, 53
Tfn 969 23 30 30
Precio orientativo: 35 €

Nazareno y Oro, Horno Asador

Cocina tradicional, asador, morteruelo, ajoarriero. Local clásico, preciosas vidrieras, buena atención, precios ajustados. Son un 3 estrellas Pepa Pink.


LOCAL
Acceso:
Fácil
Aparcamiento:
Fácil
Espacio:
Mediano (40p)
Distribución:
Amplia
Iluminación:
Bona
Mobiliario:
Sillas
Trona bebè
Limpieza lavabo:
Buena
Secador de manos:
Papel
Cambiador:
No
Extras:
No
PERSONAL
CARTA
Vestuario:
Uniforme
Amabilidad:
Eficacia:
Presentación:
Clásica

Vinos y cava:
De la Tierra
De otras tierres
Otros:

IDIOMAS
Castellano





Cuenca, la parte de la ciudad vieja, situada entre las hoces del río Júcar y su afluente el Húecar, es Patrimomio de la Humanidad desde el 1996. Las casas colgadas son su monumento más representativo y en muchos hogares, allà por los años 70, había una botella de resolí con esta forma arquitectónica. Ahora albergan el Museo de Arte Abstracto Español, con obras de Fernando Zóbel, Tàpies y Chillida, entre otros. Una visita gratuita y recomendable. Merecen una visita también el puente de San Pablo, la catedral y la torre de Mangana como parte de esta Ciudad Patrimonio.
Como "patrimonio gastronómico", Cuenca tiene platos como el ajoarriero, el morteruelo, los zarajos, asados de lechazo o cochinillo y por supuesto, quesos manchegos y miel de la comarca de La Alcarria, ingrediente del dulce llamado ajalú. Fuimos al asador Mesón Nazareno y Oro a probar algunos de estos platos y resulto ser un local muy acogedor, una decoración clásica con vidrieras impresionantes (del mismo autor que las de la catedral), una atención cercana y unos platos buenísimos.
Para acompañar la comida, un D.O. Ribera del Duero, el Protos Roble 2014 que nos trajeron con un salmorejo de aperitivo muy suave y fresco.
Empezamos con el ajoarriero, también llamado atascaburras, una pasta de patata, bacalao, huevo duro y pan rallado. Se unta en el pan y se come a temperatura ambiente, y este en concreto se come muy bien, estaba muy bueno, justo en sal, para acabar de aderezar según preferencía.
Otro plato típico de Cuenca es el morteruelo, un paté hecho de liebre, perdiz, conejo, gallina, hígado de cerdo y jamón que se come caliente. Un plato contundente, de intenso sabor y en cantidad abundante. Entre los dos no pudimos acabarlo pensando en que era mejor acabar los platos que habíamos pedido para después, así que nos lo llevamos para merendar.
Como platos principales pedimos una paletilla de cordero lechal D.O. Lechazo de Castilla que se deshacía en la boca.
Y un cochillo asado, crujiente por fuera, tierno por dentro y con ese sabor de horno tradicional. Una delicia de plato.
Nos quedamos tan satisfechos que no nos animamos con los postres y la cuenta final fue de 36 € por persona.
La atención muy buena en todo momento y el local estaba lleno por lo que parecían clientes habituales, es uno de esos restaurantes clásicos del barrio de trato familiar y comida tradicional, un acierto para probar platos típicos manchegos.

diumenge, 5 de febrer del 2017

LA CAMPANA, CUINA CLÀSSICA EN UN LLOC ACTUAL

Establiment: Restaurant La Campana
08014 Barcelona
Carrer de Vilardell, 30
Tfn 93 431 96 09
Preu orientatiu: 40€
Menú diari: 11,90€

Restaurant La Campana

Cuina catalana amb menú diari de preu ajustat. Els preus de carta no van tan a la par. Local nou i agradable, bona atenció. Un 3 estrelles Pepa Pink.


LOCAL
Accés:
Discapacitats
Aparcament:
Zona blava
Espai:
Gran (70 p)
Distribució:
Ampla
Il·luminació:
Bona
Mobiliari:
Cadires
Trona bebè
Neteja serveis:
Bona
Assecador de mans:
Paper
Canviador:
No
Extres:
No
PERSONAL
CARTA
Vestuari:
Uniforme
Amabilitat:
Eficàcia:
Presentació:
Clàssica

Vins i caves:
De la Terra
D'altres terres
Altres:

IDIOMES
Català
Castellà




El Restaurant La Campana està ubicat al barri d'Hostafrancs i ofereix una cuina catalana i plats clàssics centrats en productes de temporada amb una carta fixa i un afegit de suggeriments.
El local té un menjador adicional al soterrani, a la planta baixa hi ha un gran menjador, una barra, la cuina i els lavabos. La decoració i el mobiliari es veu molt nou, amb un aspecte modern i uns lavabos amplis i decorats "muy cuquis" amb floretes i tot.
Vam arribar sense reserva i per sort vam poder preparar-nos l'única taula que els hi quedava lliure. De seguida vam demanar un vermut i una cervesa i començar a decidir els plats. El vermut era el Murcarols, de la Pobla de Lillet, fet amb una recepta familiar, el resultat és molt aromàtic i un punt amarg al final.
Ja teníem els plats decidits així que vam acabar-nos el vermut, la cervesa i les olives arbequina que van posar-nos. Per a compartir vam prendre uns rovellons a la graella (de l'apartat de suggeriments) que no eren un plat enorme però estaven molt bons.
I un xató molt complet, amb bastant de bacallà i un romesco molt bo.
El Santi va fer uns canelons dels avis que no vaig tastar però que que ell deia que estaven força bons. I jo uns peus de porc a la graella acompanyats amb una escalivada que vaig amanir amb un oli d'arbequina estupend que estava a taula.

Per acompanyar tot això vam fer un vi molt bo, D.O. Empordà,
L'Oratori del 2015. Ens va agradar força aquest vi jove de garnatxa, Cabernet Sauvignon i samsó.
No vam fer postres i el compte va sortir per uns 36€ per cap. No pas tan econòmic en relació al menú diari.
Un lloc correcte dins l'ampla oferta que hi ha per la zona amb el "tret diferenciador" de fer una cuina casolana i clàssica de qualitat.